Esta entrada sólo pretende ser una breve continuación y confirmación de lo que contaba en esta otra entrada sobre finales de marzo, aunque habría que pasarse también por esta para entender parte de este éxito. De ellas hace dos meses y uno respectivamente, y más pronto de lo que parecía en un principio, el objetivo de llenar el contenedor-jardinera de plantas se ha visto cumplido. De hecho, hay plantas cuyas semillas no llegaron a casa hasta mediados de marzo y las plantas resultantes ya han dado todo de sí, como la Vaccaria hispanica.
Con mayor variedad de especies sembradas y un mayor control a pesar de que llevaba haciendo intentos (muchos fallidos) desde enero, a lo largo de mayo y todavía ahora, el contenedor ha quedado más lleno que el año pasado, aunque como siempre, no pongo especial atención en el orden sino que dejo a las plantas a su aire. Las lluvias y temperaturas más suaves que ha habido durante la primavera han sido de gran ayuda. Gracias a continuas resiembras y algunos aportes de semillas pregerminadas, he conseguido lo que se ve en la imagen en apenas dos meses.
En estos momentos, las especies que han florecido, se encuentran floreciendo o están muy cerca de hacerlo o bien tienen hojas muy reconocibles son:
Agerato (Ageratum houstonianum)
Neguilla (Agrostemma githago)
Antirrino (Antirrhinum majus)
Caléndula (Calendula officinalis)
Aciano (Centaurea cyanus)
Bella de día (Convolvulus tricolor)
Coreopsis tinctoria
Cosmos bipinnatus
Nomeolvides china (Cynoglossum amabile)
Margarita de Livingstone (Dorotheanthus bellidiformis)
Gilia tricolor
Gypsophila elegans
Carraspique (Iberis umbellata)
Estátice (Limonium sinuatum)
Lino rojo (Linum grandiflorum)
Lobelia erinus 'Crystal Palace'
Amapola (Papaver sp.)
Tagetes patula
Vaccaria hispanica
Zinnia 'Liliput'
Zinnia elegans
Quedan algunas especies más que no logro identificar porque son muy parecidas entre sí o bien son nuevas. Por ejemplo, hay plantas bajas de hojas muy divididas que se parecen a la arañuela (Nigella damascena) o al adonis de verano (Adonis aestivalis) y en principio creía que habría también alguna espuela de caballero, pero de momento ninguna ha tomado altura como corresponde a ésta; hay unas hojas anchas que no reconozco y podrían corresponderse a la reina margarita (Callistephus chinensis). No veo, sin embargo, nada que parezca alguna de las crucíferas que venían en la mezcla (Matthiola bicornis, Cheirantus allionii... aunque ésta última es posible que haya alguna), amapolas de California o incluso amapolas Papaver rhoeas variadas (salió una amapola que no conseguí identificar porque nunca vi en flor, pero podría ser una Papaver dubium que llegó de manera accidental).
Gypsophila elegans |
El futuro, como comentaba, es dejar simplemente que las anuales vayan cumpliendo con su ciclo vital y se autosiembren, y aprovecharé las lluvias otoñales para esparcir nuevamente semillas que puedan asentarse, con ayuda del agua, entre los recovecos que vayan dejando los restos de las plantas ya muertas a modo de cobertura retentora de humedad y quedar algo más escondidas para los pájaros, simplemente para reforzar la variedad de especies presentes y adelantarme un poco respecto a este año, que gracias a que ha sido más fresco no ha ido nada mal, pero no estaría de más empezar a ver flores desde unos meses antes.
No hay comentarios :
Publicar un comentario